La diferencia entre conocer y reconocer el nombre de Yeshua.
Conocer a una persona es una cosa y reconocer la condición o dignidad de esa persona es otra cosa muy diferente. Alguien dijo que no se puede reconocer lo que no se conoce. En este capítulo vamos a contestar las respuestas que más inquietan a los verdaderamente interesados en descubrir la trascendencia que tiene conocer y reconocer a Yeshua.
Por eso Dios también lo exaltó sobre todas las cosas y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Yeshua (Jesús) se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Yeshua el Mesías es el Señor, para gloria de Dios Padre. Filipenses 2.9-11
En este caso y sin que sirva de precedente vamos a empezar
por el final del texto que hemos seleccionado ¿Qué significa el término toda
lengua confiese? En un cierto momento Yeshua será conocido y reconocido por
toda la humanidad; en todos los países y en todos idiomas. Hasta el último
rincón de la tierra todos sabrán quién es Yeshua, pero ¿Lo reconocerán como el
Mesías Prometido de Israel? Por eso estamos hablando de conocer y reconocer
como términos parecidos, pero no exactamente iguales.
El conocer y reconocer a Yeshua cómo el Mesías de Israel es por
algo y para alguien. Cuando reconocemos que Yeshua es el Mesías estamos dando
la gloria, entiéndase también el reconocimiento a Dios. El Mesías cómo único
mediador entre Dios y los hombres nos reconcilia con el Creador. Cuando
vocalizamos que Yeshua es el Mesías estamos reconociendo la mediación del
Mesías y el amor de Dios por sus criaturas.
El nombre que llevamos tiene innegable influencia sobre cada
uno de nosotros. En el caso del nombre de Yeshua hemos de saber que ha sido
puesto por Dios directamente con la autoridad sobre todo nombre que se vocalizó
en el pasado, que se vocaliza en el presente y que se pueda vocalizar en el futuro.
El nombre de Yeshua es un nombre, entiéndase una a autoridad, sobre toda
autoridad. No hay otra autoridad en todo el universo que se pueda comparar al
nombre de Yeshua.
La autoridad del nombre de Yeshua se extiende sobre todos
los que están en el Cielo, todos los que están en la tierra y todos los que
están debajo de la tierra ¿Qué quiere decir esto? Hay autoridades que están en
todos los niveles conocidos como Cielo, tierra y debajo de la tierra que no es
una mera descripción hipotética. Las autoridades espirituales están en
diferentes niveles o planos físicos y evidentemente en el plano espiritual. El
nombre de Yeshua tiene toda la autoridad o poder en todos los planos físicos,
emocionales y espirituales.
El enfrentamiento que tenemos está en los recién mencionados
planos materiales, emocionales y espirituales en los cuales el nombre de Yeshua
tiene toda la autoridad. Si conocemos o sabemos que Yeshua tiene toda la
autoridad en todos los niveles debemos reconocer esa misma autoridad en toda
situación en la que nos encontremos.
En muchas ocasiones no estamos conscientes de que Yeshua
tiene toda la autoridad y nos limitamos a saberlo, pero no a reconocerlo con la
fe y firmeza necesaria para que tenga efecto en nuestra vida. Lo que
vocalizamos debería ser lo que reconocemos por eso la gran importancia de saber
lo que tenemos que decir e incluso lo que no tenemos que decir.
“Si confiesas con tu boca que Yeshua es el Señor y crees en
tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo” Carta a la
Comunidad Judía en Roma (Romanos 10.9)
La expresión si confiesas con tu boca significa
si reconoces y vocalizas que Yeshua tiene toda la autoridad sobre todo nombre
en el Cielo, en la tierra y debajo de la tierra estarás a salvo de las
autoridades del mal que pretenden arrastrarte a la oscuridad y la perdición. Con
el corazón se conoce o se cree, conocer y creer si están relacionados, pero con
la vocalización se reconoce lo que se conoce, valga la redundancia. Cuando
conocemos la persona de Yeshua y reconocemos su autoridad como el Mesías vocalizaremos
su nombre para pedir ayuda a Dios. Las oraciones o rezos van dirigidos a Dios
en el nombre de Yeshua.
La oración que nos enseñó el Mesías no deja lugar a dudas de
la relación que tiene con todo lo que estamos enseñando en este momento ¿Cómo
tenían que orar o rezar sus discípulos? ¿Acaso no sabían como rezar estando en
un contexto espiritual y religiosos netamente judío? Si en algo se diferencia
el Judaísmo en general es por el abundante fondo de rezos y oraciones en toda
circunstancia o situación. En nuestros días se le sigue dando mucha importancia
a los rezos que se vocalizan en las sinagogas en sus diferentes periodos del
rezo diario.
Los discípulos del Mesías sabían perfectamente que rezar, a
que hora rezar y que pedir a Dios dado el amplísimo fondo de rezos, antes
nombrado, en el contexto del Judaísmo entonces ¿Por qué le pidieron a Yeshua
que les enseñara a rezar? La oración o rezo que Yeshua les enseñó empieza por
definir un lugar para rezar y a quién debemos de rezar.
En ningún caso Yeshua les dijo que le rezaran a él sino al
Padre entiéndase a Dios. Cuando conocemos y reconocemos a Yeshua deberíamos
tener muy claro en dónde hemos de rezar prioritariamente, aunque no
exclusivamente, pero sobre todo a quién debemos de rogar y pedir ayuda aquí sí de
forma exclusiva al Padre.
Yeshua enseñó a sus discípulos a rezar a Dios y darle toda
la gloria tal como Yeshua mismo le daba toda la gloria al Padre incluso con su
mismo nombre como anteriormente señalamos cuando leímos “y toda lengua
confiese que Yeshua el Mesías es el Señor, para gloria de Dios Padre”. El
nombre de Yeshua y su dignidad mesiánica siempre dará la gloria a Dios. Yeshua nos
enseñó que todo lo que pidamos a Dios se le pida exclusivamente a Dios en su
nombre, esto es, en el nombre de Yeshua o en otras palabras con la autoridad
que tiene sobre todo nombre en los Cielos, en la tierra y debajo de la tierra.
La autoridad del nombre de Yeshua se extiende a todo el universo,
a toda nación, a toda lengua, a toda la autoridad en el Cielo, en la tierra y
debajo de la tierra como reiteradamente estamos diciendo. La guerra espiritual
que tenemos está en todos los niveles, pero gracias a Dios que nos ha enseñado
el nombre de Yeshua para resistir frente a todas esas autoridades que es
extienden por toda la creación que vemos y también a la que no percibimos con
los sentidos naturales.
“porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino
contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas
de este mundo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”
Carta a la Comunidad Judía en Éfeso (Efesios 6.12)
La lucha que tenemos no es contra personas o situaciones que
se desprenden de la vida física en la cual convivimos. La lucha que tenemos es
contra autoridades o jerarquías como principados, potestades, gobernadores y
huestes de maldad. Unas jerarquías que tienen autoridad en regiones físicas y
espirituales. Los gobernadores de las tinieblas tienen autoridad sobre lugares
oscuros como son las llamadas ciencias ocultas que lo que no dejan ver con los
ojos naturales es las autoridades oscuras que las gobiernan.
Todos aquellos que están relacionados en alguna forma con
las ciencias ocultas en sus múltiples formas y nombres deben de saber que están
bajo la autoridad de esos gobernadores o jerarquías de las tinieblas. Las regiones
celestes son lugares geográficos espirituales donde ejercen autoridad los
gobernadores de las tinieblas. Los ingenuos se meten en la boca del lobo, pero
los advertidos miden bien sus pasos para no entrar en esas regiones de
oscuridad donde el mal tiene autoridad.
El nombre de Yeshua tiene la autoridad sobre todo nombre por
el hecho innegable de su resurrección. La muerte es un nombre de autoridad que también
ha doblado su rodilla ante el nombre de Yeshua el Mesías que entró en región
celeste de la autoridad de la muerte y la derrotó. El Cielo nos escucha cuando
rogamos su intervención sea en la situación que sea en el nombre de Yeshua y
así se lo enseñó el Mesías a sus discípulos.
Todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, lo haré, para
que el Padre sea glorificado en el Hijo. Juan 14.13
La autoridad de Yeshua se extiende sobre toda autoridad,
región física o espiritual además de tener autoridad sobre toda lengua o idioma
¿Nos escucharía Dios si rezáramos en otra lengua que no sea hebreo, griego o
latín? Dios nos escucha en toda lengua o idioma y seamos de la nación que
seamos. Si conocemos y reconocemos que Yeshua es el Mesías pediremos al Padre
en el nombre de Yeshua que cómo hemos dicho tiene toda autoridad sobre todo
nombre al ser el único mediador entre Dios y los hombres.
En este punto volvemos a hacernos la misma pregunta ¿Qué
trascendencia tiene conocer y reconocer el nombre de Yeshua? La trascendencia
es tan evidente como saber diferenciar la luz de las tinieblas.
Cuando la Luz se acerca a las tinieblas el enfrentamiento se recrudece y
especialmente en este peligroso tiempo dónde los hombres son crueles en
extremos inimaginables cómo seguimos señalando en cada capítulo.
La transcendencia de conocer y reconocer a Yeshua como el
Mesías tiene que ver con conocerle y reconocerle para que con ello demos la
gloria al Dios. Toda forma de ocultación del nombre de Yeshua está propiciada
por los poderes fácticos o sectores influyentes que ejercen dominio sobre los
planos físicos y espirituales de este mundo. La guerra espiritual es mucho más
fuerte de lo que nos damos cuenta, pero el nombre de Yeshua es la autoridad
sobre toda autoridad que demos conocer y reconocer para salir victoriosos de
todo enfrentamiento.
Los problemas a los que nos enfrentamos a diario deben
presentarse a Dios en el nombre de Yeshua, esto es con su autoridad, para que
intervenga en nuestros respectivos problemas. Todo esto no implica excluir a
nadie más bien todo lo contrario. Los prejuicios con los que hemos convivido en
cada generación deben ser quitados en el nombre de Yeshua reconociendo a los
demás como iguales a nosotros incluso como superiores para que seamos
escuchados en el Cielo y se haga la voluntad de Dios en la tierra y debajo de
la tierra.
Juan le respondió diciendo: —Maestro, hemos visto a uno
que en tu nombre echaba fuera demonios, pero él no nos sigue, y se lo
prohibimos porque no nos seguía. Marcos 9.38
En muchos casos tenemos la triste tradición de juzgar a los
demás por sus etiquetas religiosas negando el deber y el derecho a vocalizar el
nombre de Yeshua a otros grupos o personas. Los que conocen y reconocen el
nombre de Yeshua deben de amar al prójimo de tal manera que no los prejuzguemos
y critiquemos de forma insensata u orgullosa. No quiere decir esto que no
debemos juzgar todas las cosas. Lo que significa es que no debemos acusar a
nadie malintencionadamente, pero si discernir lo bueno de lo malo, lo dulce de
lo amargo o la luz de las tinieblas.
La meta a la cual deberíamos aspirar es a ser uno, aun
siendo pocos o muchos, empezando por nuestra propia casa o familia. La unidad
de acción es la unidad de bendición repartida para todos a nivel familiar y
comunitario. La vida en torno al nombre Yeshua no está exenta de dificultades o
sobresaltos, pero lo que debemos saber es que en el nombre de Yeshua podemos
enfrentarnos a toda situación por muy dura que nos pudiera parecer. Más que
prohibir algo a alguien a lo que estamos llamados a bendecir a todos en el
nombre de Yeshua el Mesías.
Muchos viven a oscuras tropezando una y otra vez en las
mismas piedras, pero sin saber cómo defenderse del mal ¿Qué somos nosotros?
Somos la luz del mundo por lo cual no podemos ocultar la luz de Dios y
ocultarnos bajo la mesa del miedo al qué dirán si les hablo de Yeshua. Como
dijimos al principio no solo se trata de que conozcan a Yeshua. Lo que también
necesitan es reconocer su autoridad por la cual podrán ser escuchados por Dios
¿Acaso no es transcendentes conocer y reconocer a Yeshua para ser escuchados
por Dios? Ciertamente que es de vital importancia conocer y reconocer a Yeshua
para lo cual debemos también ser ejemplos en nuestras palabras y hechos.
En términos generales muchas personas puede que conozcan a
otras muchas, pero cuando se reconoce a alguien lo que se está haciendo es
admitir o aceptar que alguien o algo tiene determinada cualidad o condición
¿Qué cualidad o condición tiene el nombre de Yeshua? ¿Qué cualidad tiene
Yeshua? Conocer a alguien es una cosa y reconocer la condición o dignidad de
alguien es otra cosa muy diferente. Alguien dijo que no se puede reconocer lo
que no se conoce.
Hizo además Yeshua muchas otras señales en presencia de
sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero estas se han
escrito para que creáis que Yeshua es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que,
creyendo, tengáis vida en su nombre. Juan 20:30–31
El inestable andamiaje religioso que se ha levantado
alrededor de Jesús y sus discípulos en el ámbito cristiano se vendría abajo si
se diera a conocer y se reconociera el verdadero nombre hebreo de Jesús, que
como ya hemos señalado en repetidas ocasiones es Yeshua. No solamente por el
hecho de conocer su nombre sino por las implicaciones que conllevan reconocer
el nombre que ha sido revelado a los hombres por el cual un día toda lengua
confesará y reconocerá que Yeshua es el Mesías.
Hoy es el tiempo de ir a nuestra habitación, recámara o
dormitorio y encontrarnos con el Creador pidiéndole que aumente nuestra fe. La
necesidad que tenemos es la de conocer y reconocer al Mesías y pedirle a Dios
que intervenga en nuestra vida en su nombre ¿Cuál es la promesa que
recibiremos? Qué todo lo que pidáis
al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Toda
nuestra vida puede cambiar si nosotros cambiamos conociendo y reconociendo la
autoridad sobre todo lo visible o invisible de la Creación. Si creemos tendremos
vida en su nombre. Una nueva vida en nombre sobre todo nombre de Yeshua. Hazlo
saber.
Comentarios